Me doy este capricho todas las noches y no engordo ni un gramo. Es el único pastel que puedo comer después de cenar. ¡Solo tiene 90 calorías!
Ingredientes:
2 tazas (aproximadamente 500 g) de yogur griego natural
3 huevos medianos
½ taza (aprox. 60 g) de maicena
Edulcorante (eritritol, miel u otros; la cantidad puede variar)
3 gotas de extracto natural de vainillaMejores restaurantes cerca de mí
Preparación:
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Mezcla todos los ingredientes líquidos en un bol grande: yogur griego, huevos, edulcorante y vainilla. Remueve hasta obtener una mezcla homogénea, ya sea a mano o con una batidora eléctrica.
Incorpora la maicena tamizada y remueve suavemente para evitar grumos.
Forra un molde para pastel (de 18 a 20 cm de diámetro) con papel de horno ligeramente engrasado o humedecido para que se adhiera bien.
Vierte la masa en el molde y alisa la superficie con una espátula.
Hornea en horno precalentado a 180 °C (356 °F) durante unos 50 minutos, hasta que la superficie esté ligeramente dorada.
Deja enfriar el pastel al menos 30 minutos después de hornearlo antes de desmoldarlo y servirlo.
Yogur desnatado
Consejos:
Para una versión más cremosa, puedes sustituir parte del yogur por ricotta light.
El pastel se puede servir con fruta fresca, compota de frambuesa o una pizca de canela.
Se conserva en el frigorífico de 2 a 3 días en un recipiente hermético.